El trabajo más importante no es el de la transformación del mundo, sino el de la transformación de nosotros mismos.
Juan Pablo II
El 1 de mayo se conmemora el Día Internacional del Trabajador, recordando a los obreros que fueron detenidos y ejecutados en el año 1887 tras el reclamo de reivindicaciones laborales.
El 1 de mayo de 1886, en Chicago, Estados Unidos, los obreros se movilizaron en reclamo de reivindicaciones laborales, principalmente el pedido de reducción de la jornada laboral de ocho horas. La protesta, iniciada por 80.000 trabajadores, desembocó en una huelga nacional que afectó a numerosas fábricas.
El resultado fue exitoso en todos lados, menos en Chicago: los trabajadores de la fábrica McCormik, se congregaron frente a la misma el 4 de mayo de 1886 haciendo uso de su palabra. En pleno acto, una bomba estalló provocando seis policías muertos, las fuerzas policiales reaccionaron atacando despiadadamente con un resultado de 38 muertos y 115 heridos. Algunos dirigentes fueron condenados a muerte.
En julio de 1889, en París, se realizó el Congreso Internacional de Trabajadores, donde se estableció el 1 de mayo como día de ratificación de los derechos de los trabajadores y de reclamos contra las arbitrariedades sociales.
Durante el siglo XX, los progresos laborales se fueron sustentando con leyes para los trabajadores, otorgándoles derechos de respeto, retribución y amparo social.
En Argentina, se destacan la Ley 4.661 de descanso dominical; la Ley 9.688, que establece la obligación de indemnizar los accidentes de trabajo y las enfermedades profesionales; la Ley 11.544, que limita la jornada laboral a 8 horas y la «Ley de despido», que implica el preaviso y las indemnizaciones correspondientes.
Escoge un trabajo que te guste, y nunca tendrás que trabajar ni un sólo día de tu vida.
Kung FuTse, Confucio