Carita dulce,
tibieza en la voz
palabras serenas
de recuerdos y amor.
Tus ojos son un océano
donde puedo navegar;
tus brazos, la más bella playa para soñar y descansar.
En la noche, mi refugio
junto a tus manos está.
En el día, mariposas
siempre abiertas para dar.
Regálame un cuento,
un beso, una canción, regálame tu tiempo,
abuelito de mi corazón.