Poesía: Para dormir
No podía dormir, me asomé a la ventana, estaba la noche friolenta tejiendo estrellas de lana. Estaban todas prolijitas en punto santaclara, la luna ovillo le prestaba sus hebras color…
No podía dormir, me asomé a la ventana, estaba la noche friolenta tejiendo estrellas de lana. Estaban todas prolijitas en punto santaclara, la luna ovillo le prestaba sus hebras color…